06 Dic Decálogo para periodistas deportivos principiantes que los medios de comunicación no quieren que veas
Si formas parte de los periodistas deportivos principiantes y quieres dedicarte a la información deportiva, deberías leer este decálogo para que después no te lluevan palos por todos lados
Isabel Arroyo Sauces
Que la cosa está muy mal para encontrar trabajo es algo que ya sabe todo el mundo. Desde la más tierna infancia nos exigen que hagamos los deberes, que estudiemos y que nos esforcemos al máximo para obtener la mayor reputación posible. Nos pasamos toda la juventud estudiando y al terminar la universidad, descubrimos que todo es una farsa y a la hora de la verdad, la formación sirve de poco para encontrar trabajo y poder vivir dignamente de él. Sin embargo, existen carreras universitarias que se estudian por vocación y a pesar de todos los inconvenientes, uno sabe que solamente será feliz desarrollando esas aptitudes. Así que, periodistas deportivos principiantes, tened en cuenta mis consejos.
La formación sirve de poco para encontrar trabajo y poder vivir dignamente de él
Hasta ahí, todo muy bien, pero hay que aprender que el precio a pagar por hacer lo que te gusta no puede ser cualquiera. Si tu mayor ilusión es ser periodista de deportes, adelante, pero recuerda aprenderte para siempre este decálogo para que puedas demostrar lo que vales y que los superiores no puedan aprovecharse de ti. Este decálogo no se estudia en la asignatura de Recursos Humanos, sino que lo enseña la vida propia. Quédate con la copla:
1. Nunca trabajes gratis
Primer punto de este decálogo y el más importante también. Si el periodismo en general y el periodismo deportivo en particular están pasando por uno de los peores momentos de la historia es por lo mal pagado que está si es que lo está. Hay muchas páginas web que buscan colaboradores para escribir en ellas de forma gratuita con el fin de que estos jóvenes periodistas o estudiantes de Periodismo adquieran experiencia. Señores, la experiencia no paga la cesta de la compra y los periodistas, por muy jóvenes y novatos que sean, también comen todos los días.
La experiencia no paga la cesta de la compra y hay que comer todos los días
¿Sabes para lo que sirve tu trabajo gratuito? En 2017, Jordi Cruz salió a la palestra por la siguiente polémica: el chef catalán defendía que en su restaurante de estrella Michelín, los becarios no cobrasen ni un duro porque, según él, estaban aprendiendo de los mejores y si todo el mundo estuviese en plantilla, el negocio no saldría rentable. «Las dos partes ganan. Es un ‘tú me das tus manos y yo te enseño'», afirmaba.
Jordi Cruz es partidario de no pagar a los becarios y luego se compra un palacete por tres millones de euros. Para eso sirve tu trabajo gratuito
Las palabras de Jordi Cruz hervían la sangre a la opinión pública al recordar otra noticia en la que se anunciaba que el cocinero y su entonces novia se habían comprado un palacete por tres millones de euros. Pues sí, para eso sirve tu trabajo gratuito. Este ejemplo es de la alta cocina, pero se puede aplicar al resto de trabajos por igual y si nadie se prestara a trabajar sin remuneración, se acabaría la precariedad laboral.
2. Tú no has estudiado una carrera para tener que malvivir
María y tú erais las mejores amigas del colegio y del instituto a pesar de lo diferentes que sois. Tú eras la más empollona de la clase y ella era muy lista, pero no estudiaba porque no le daba la gana. Su madre siempre te ponía de ejemplo y le hubiese encantado que María hubiese ido a la universidad como tú, pero ¿para qué? Hoy día, María trabaja como cajera de un supermercado. Se ha casado, tiene dos hijos y junto con su marido, se han comprado una casa y pueden irse todos los veranos de vacaciones. En cambio, a ti te dio por estudiar Periodismo y a pesar de que ya tienes una edad, todavía vives de alquiler en un piso compartido aguantando los roces de la convivencia porque tu sueldo no te da ni para un estudio de menor tamaño que una ratonera. ¿Te suena esta historia?
Tu amiga cajera se compró una casa con su marido mientras que a ti te dio por estudiar Periodismo y aún tienes que compartir piso y aguantar los roces de la convivencia
Claro, es que tu medio de comunicación solo te quiere para trabajar como freelance y la mayor parte de las cuatro perras gordas que te paga se van para la cuota de autónomos. O puede ser que te lo pinten todo muy bonito, pero no te den de alta en la Seguridad Social y ni siquiera cobres como para poder cotizar como autónoma. Te dicen que un periodista es periodista las 24 horas del día y las mil horas extras que trabajas no te dan ni para una bolsa de gominolas, pero tú lo aceptas, porque como esa es tu vocación… La sociedad cree que debes aceptar este tipo de condiciones porque si no, no vas a trabajar en la vida. Pues no, aunque formes parte de los periodistas deportivos principiantes, tú no has sacrificado toda tu juventud estudiando para ahora tener que malvivir.
Te dicen que un periodista lo es las 24 horas del día y las mil horas extras que trabajas no te dan ni para una bolsa de gominolas
Según Periodista Digital, diversas fuentes han confirmado que el sueldo de Susanna Griso asciende a los dos millones de euros anuales netos. Sin entrar en las cuestiones que aborda esta noticia, es comprensible que Griso sea una periodista consagrada y que la pérdida del anonimato suba el caché, pero lo que no puede ser es que un trabajo como presentadora de televisión valga dos millones de euros y una jornada laboral en un periódico o portal de Internet con sus correspondientes horas extra den, como mucho, el salario mínimo interprofesional y muchos periodistas se dediquen a otra cosa porque su vocación no les dé de comer.
No aceptes ofertas basura
Tú, joven periodista, Ravelo te aconseja que, o te dan unas condiciones óptimas de trabajo o no aceptes ofertas basura. Si al medio de comunicación no le sale rentable que todos sus periodistas tengan un sueldo digno es su problema, no el tuyo.
3. La universidad es una empresa y tú, un cliente, pero nada más
No sé si tu caso ha sido el de haber aprendido mucho en la carrera o no haber aprendido nada y pensar que para lo que te han dado, podrías habértela ahorrado, pero da igual. Puede que después de la licenciatura o grado, hayas querido ampliar tu formación con un máster o con cursos especializados. Seguramente, los profesores te hayan dicho más de una vez que, aunque hayas terminado la carrera o el máster, ellos siempre estarán ahí para lo que necesites.
Nunca esperes que los profesores te hagan un favor ni que te echen una mano
MENTIRA. Ellos cobran por darte clase, no por resolverte la vida una vez quieras incorporarte al mercado laboral. Puede que esta lección te cueste años y años entenderla, pero para la universidad, mientras pagues, qué bueno eres y una vez terminas, si te he visto, no me acuerdo. Nunca esperes que te hagan un favor ni que te echen una mano.
4. No hagas un máster
Los másteres te aseguran prácticas, que no trabajo
Nadie te pide titulación para trabajar en los medios: ¿Para qué quieres un máster?
5. Exige formalidad
¿Qué pasaría si llegases tarde a una entrevista de trabajo por el motivo que sea? Seguramente perderías ese puesto porque demostrarías que eres alguien informal. Vale, y si a ti los de arriba te exigen formalidad por activa y por pasiva, ¿por qué tú tienes que aguantar tantas largas?
¿Por qué tienes que aguantar tantas largas? Si fueses el anunciante que les va a pagar 20.000 euros diarios por un banner en la web, verás cómo contestaban inmediatamente
Hay veces en las que no contactas con los medios de comunicación directamente para pedir trabajo, sino para hacerles propuestas con tus proyectos, o quizás necesites hablar con alguien para otros temas. Pues bien, hay muchos casos en los que directamente no te contestan o bien te dicen que te llamarán en cinco minutos y tú te quedes esperando los días y los meses. No esperes más. Si fueses el anunciante que les va a pagar 20.000 euros diarios por un banner en su web, verás cómo contestaban inmediatamente.
Que tú seas principiante no justifica que nadie te tenga que dar desplantes
No pierdas tiempo, que seáis periodistas deportivos principiantes no justifica que nadie os tenga que dar desplantes ni que sean informales. Si ellos no quieren saber nada de tus proyectos, preséntalos a otros medios o busca financiación por tu cuenta, pero hazte respetar.
6. Tu tiempo es oro, ve a lo práctico
7. No pienses que no vales porque no encuentres trabajo
Doy por hecho que si eres fan de Ravelo es porque eres una persona muy inteligente, así que no te vengas abajo si no te llaman para trabajar ni pienses que esto pasa por errores tuyos. Por ejemplo, te invito a que reflexiones sobre el techo de cristal, ese techo que impide a las mujeres llegar al escalón más alto laboralmente hablando: ¿Acaso Hillary Clinton no llegó a la Presidencia de los Estados Unidos por estar menos preparada que Donald Trump?
Quizá los de arriba no te contraten porque sepas más que ellos
Te invito también a que descubras la historia de muchas mujeres superdotadas que no han podido ascender a los altos cargos en sus trabajos porque sus jefes, al descubrir sus altas capacidades, decidieron quitarlas del medio. A lo mejor, tú eres una de esas personas valiosas a las que los de arriba no quieren darles una oportunidad porque no quieren a nadie en plantilla que sepa más que ellos ya que tienen miedo a que tú les quites el puesto.
No pienses que tú no vales. Mejor piensa que ellos se lo pierden
Además, es posible que haya gente menos preparada que tú con mejor puesto laboral y el motivo simplemente sea que los jefes sepan perfectamente que a esas personas las pueden manejar igual que a marionetas, pero a ti no. De verdad, no pienses que tú no vales. Mejor piensa que ellos se lo pierden.
8. No te esmeres tanto con el currículum
Los portales de empleo de Internet no hacen más que hacer hincapié en un buen currículum, pero a la hora de la verdad, en la mayoría de las profesiones nadie te pide titulación. Es más, la mayoría de la veces, tu currículum vitae va a ir a parar a la papelera. ¿Para qué quieres adornarlo tanto? Tienes varias carreras, varios másteres y hablas varios idiomas, pero eso muchas veces puede jugar en tu contra. Y es que el director de recursos humanos de turno puede que piense que toda tu formación no le va a servir a la empresa para sacarle las castañas del fuego, sino que no valgas para cubrir ese puesto de trabajo por sobrecualificación.
9. Piensa en qué dirían los demás si ese medio de comunicación en vez un trabajo, fuese la persona que te gusta
Hay quien piensa que tienes que hacer todo cuanto esté en tu mano para conseguir el trabajo de tu vida, por eso presentas tu currículum con carta de presentación incluida de la mejor manera posible. Como piensas que eso no es suficiente, te presentas allí con tu mejor presencia para mostrarles tus proyectos personalmente mientras que los jefes, sin apenas echarles un vistazo, te dicen que ya te llamarán. Entonces, esperas y esperas, pero como no te llaman, piensas que a lo mejor es que al medio se le ha olvidado y vuelves allí con otro proyecto aún más interesante. Vuelta a lo mismo y así una vez, otra vez, otra vez…
Lo único que estás haciendo es arrastrarte como las culebras
También hay quien dice que si te enamoras, luches por lo que quieres. Sin embargo, a pesar de que te acerques a esa persona con tu mejor atuendo y tu mejor sonrisa y le propongas hacer planes juntos, esa persona apenas te presta atención y siempre tiene mejores cosas que hacer. Aún así, tú insistes e insistes. Es ahí cuando tu círculo más cercano te abre los ojos diciéndote que esa persona no te ha correspondido y te recomienda que dejes de insistir porque lo único que estás haciendo es arrastrarte como las culebras. Y si no merece la pena arrastrarte por alguien que te gusta, ¿va a merecer la pena arrastrarte por un trabajo en donde ya te han dejado claro que no te quieren en su equipo?
10. Valórate, acepta la realidad y no tengas miedo
El machismo en el periodismo deportivo es la dura realidad le pese a quien le pese
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