22 Ago De no pasar las eliminatorias a ser campeonas del Mundo

Felicidades a las campeonas del Mundo

Isabel Arroyo Sauces

Cada vez que hay un Mundial, siempre hay tres tipos de aficionados: el soñador, el agonías y el realista. El soñador es aquel que piensa que su selección va a ganar independientemente del nivel con el que llegue y que va a aplastar a todos los equipos que se les ponga por delante sin despeinarse. El agonías se divide en dos: el pesimista, que es aquel que todo lo ve negro por naturaleza y el hater, que es el que disfruta viéndolo todo negro. Luego está el realista, al cual lo confunde mucha gente con el agonías pero no tiene nada que ver, pues se trata de aquel que no le pone emoción nunca al asunto porque dice la verdad. ¿Y cuál es la verdad? Que los partidos hay que jugarlos y que el futuro no lo sabe nadie.

Las estadísticas y el presente

El primer Mundial de fútbol femenino se celebró en 1991 en China. A partir de entonces, se celebraría cada cuatro años igual que el masculino, pero en años impares, concretamente, un año después del de ellos (el primero de ellos fue un año después de Italia 90). Me parece una buena idea ya que así una competición no le hace sombra a la otra.

Desde China 1991 hasta Australia y Nueva Zelanda 2023 han transcurrido 32 años y 9 ediciones

Hasta Francia 2019, habían pasado 28 años y 8 ediciones, por lo que es obvio que había muy pocos países con estrella. Los afortunados eran Estados Unidos (4), Noruega, Alemania (2) y Japón. En cuanto a España, la primera vez que participó en un Mundial fue en Canadá 2015, donde cayó en la fase de grupos. Volvió a participar en la siguiente edición y avanzó sólo un pasito: cayó en octavos. Puestos a rebuscar en la historia, las estadísticas decían que la selección española no había sido capaz de pasar un fase eliminatoria ni en Mundiales ni en Eurocopas. Ya sabéis: eran otros tiempos.

Lo que no era normal era lo de la Eurocopa 2022 (2021 en un principio pero que se aplazó a causa de la pandemia). La liga española había subido de nivel hasta tal punto de que el Barcelona tenía tres finales de Champions consecutivas, una de ellas, con premio incluido. Además, Alexia había ganado un Balón de Oro. Sí es cierto que la mediocampista catalana no participó por lesión, pero las que estaban en el terreno de juego eran la mayoría sus compañeras del Barça, un equipazo. No pegaba que España cayera en cuartos a la primera de cambios.

No fue normal lo de la Eurocopa 2022: lo normal es que sean campeonas del Mundo

En 2023, las jugadoras española distan mucho de aquellos tiempos en los que el fútbol femenino era invisible y el nivel ha subido como la espuma. Hubo 15 futbolistas que protestaron y desde la federación dijeron que volverían a vestir la camiseta de España cuando San Juan baje el dedo. Era entonces el momento del «equipo B», llamado así por los haters con desprecio. ¿Acaso estas jugadoras no iban a aprovechar su oportunidad? Fue en amistosos, pero si les plantaron cara a potencias como Suecia o Estados Unidos no fue por casualidad. De las 15, Aitana Bonmatí, Ona Batlle y Mariona Caldentey dieron marcha atrás. Bienvenidas por su calidad. También fueron convocadas Alexia Putellas, Jennifer Hermoso e Irene Paredes. Todas ellas más las heroínas en la sombra (véase Teresa Abelleira) formaban un equipazo. Lo normal es que se convirtieran en campeonas del Mundo.

Olga Carmona: la gran heroína

Ya pasó en Sudáfrica 2010: los goleadores fueron todos del Barcelona, la mayoría de la plantilla era catalana y parecía que en la selección española no existía nada más que el Barça. Evidentemente, al que siente los colores rojigualda de verdad, eso le da igual y se alegra de sus triunfos marque quien marque.

En tiempos prósperos para el Barcelona, la heroína de la final ha sido Olga Carmona, andaluza y madridista

En Australia y Nueva Zelanda 2023, las goleadoras han sido más variadas. Es cierto que las culés y catalanas han destacado mucho, pero no hay que olvidar a Alba Redondo, Jennifer Hermoso, Teresa Abelleira, Esther González y, cómo no, Olga Carmona. Esta última fue la elegida por los dioses para meter el gol que llevó a las españolas a la final y el gol que las coronó como campeonas del Mundo. Andaluza y madridista. Personalmente, yo siento mucho orgullo por ella (especialmente, por lo de andaluza), pero si la goleadora de la final hubiese sido, por ejemplo, Aitana Bonmatí, igual de contenta estaría. Por cierto, este año pido el Balón de Oro para Aitana.

Alexia se merece este Mundial

De Alexia Putellas habla todo el mundo: los soñadores, los agonías y los realistas. Los primeros la veían como una pieza imprescindible dentro del conjunto de Jorge Vilda, pues está considerada la mejor futbolista del mundo y lleva ya dos Balones de Oro en su palmarés. Los agonías/haters piensan que está sobrevalorada y ponen como prueba que no ha marcado ningún gol ni ha estado siempre en el once titular (y cuando ha estado, tampoco ha jugado un papel relevante). Los realistas reconocen que la muchacha ha estado muchos meses de baja y era muy difícil que rindiera al 100% en este Mundial.

Nadie se rompe el ligamento cruzado de la rodilla por gusto

Personalmente, creo que la vida le debía una buena a Alexia. No es justo que, con lo buena que es y con todo lo que trabaja, tuviera que romperse el ligamento cruzado de la rodilla y se quedara sin Eurocopa, pero en numerosas ocasiones, la vida es así de cochina. Vale que en este Mundial no fuera la protagonista ni estuviera en su mejor momento, pero las lesiones no acaban con el talento de nadie. Me parece genial que este título esté dentro del palmarés de Alexia porque se lo merece. Lo que no se merece sería lo contrario.

El futuro de España

La media de edad del actual combinado español es de 25 años. Vamos, que la selección es joven. Solamente cuatro jugadoras superan la treintena mientras que Salma Paralluelo aún tiene 19. Las demás son de veintitantos. ¿Podrían seguir en buena forma para la siguiente edición? Si las lesiones acompañan, sí.

La media de edad de las campeonas del Mundo es de 25 años

Todavía quedan cuatro años para el próximo Mundial. De hecho, todavía ni siquiera se sabe dónde va a ser la sede. Más próximos están la Liga de Naciones y los Juegos Olímpicos, ambos en 2024 y el primero da billete al segundo. Ojalá siga la racha y, por qué no, vengan todos los títulos de golpe.

@ravelodeporte