A Sergio Ramos le encanta complicarse la vida

«Los que rajan acabarán callados, como siempre»

Sergio Ramos en el partido de la selección ante Italia: EFE.

Sergio Ramos en el partido de la selección ante Italia: EFE.

Tras el 8-0 de la Roja a Liechtestein el pasado 5 de septiembre, el duelo Italia-España en Turín en el que estaba en juego la primera plaza de grupo se presentaba como una prueba de fuego tanto para el nuevo seleccionador nacional, Julen Lopetegui, como para sus hombres. Por el juego, la estrategia y el 0-1 del momento, España podría haber aprobado este examen con notable alto, pero un penalti provocado por Sergio Ramos a Eder que desembocó en gol de De Rossi y empate al final del partido bajó la nota y mucho.

Cuarto penalti de la temporada

El capitán del Real Madrid y de la selección española está considerado uno de los mejores centrales de Europa, si no el mejor por los entendidos de fútbol. Sin embargo, muchos son los goles que sus equipos llevan ya en contra con el andaluz como principal culpable. Y es que en cuanto a penaltis provocados se refiere, Ramos suma con este el cuarto de la temporada.

Ya en la Supercopa de Europa, primer partido oficial de la campaña 2016/2017, Ramos provocó un penalti sobre Vitolo que Konoplyanka transformó en 1-2 para el Sevilla. Como forma de pedir perdón, el capitán madridista empató el encuentro en su minuto preferido (ni que decir tiene que es el 93) forzando así una prórroga que finalmente resolvería Carvajal a favor del Real Madrid.

El primero de la Liga lo produjo en la tercera jornada frente a Osasuna sobre Jaime. La suerte para el Madrid fue que Kiko Casilla detuvo el lanzamiento de Roberto Torres, todo eso sin contar que los blancos fueron muy superiores y el resultado final fue 5-2 (gol de Ramos incluido).

Con el tercer penalti provocado del defensa sevillano, se acabaron las victorias madridistas para ser sustituidas por los empates. Fue contra el Villarreal en el Bernabéu, donde Sergio Ramos hizo una mano dentro del área. Y una vez más, quiso arreglar la situación y marcó poco después un cabezazo.

Otras maneras de complicarse la vida

Aunque la provocación de penas máximas en contra empieza a ser algo habitual en el juego de Sergio Ramos, estos no son los únicos riesgos con los que juega el defensa. Por citar algún ejemplo más, en el último Clásico en el Camp Nou, Ramos vio una cartulina amarilla y ni por esas dejó de arriesgar sobre los contrarios. Tanto se complicó la vida que al árbitro acabó sacándole la segunda y a la calle. Ya con diez en el terreno de juego, el Real Madrid se llevó la victoria por 1-2.

«Los que rajan acabarán callados»

Sergio Ramos dice sentirse «orgulloso del partido, no del penalti». Consciente de las críticas del día después, el internacional español manda un mensaje a sus detractores: «Que disfruten ahora quienes me tienen que rajar porque ya luego callaré bocas. Ya tengo la espalda y el culo pelado. Ni me he venido arriba con los halagos, ni me van a destruir con las críticas».

 

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