16 Ene Patinaje artístico vs. investigación: España, ponte las pilas

Gran parte del enorme despilfarro del dinero público podría ir a lo que de verdad importa

Isabel Arroyo Sauces

Muchos aficionados consideran a Javier Fernández como el deportista español más meritorio de todos los tiempos. ¿El motivo? Haber triunfado en un deporte como el patinaje artístico, el cual apenas cuenta con recursos en España.

Los éxitos de Javier Fernández no han sido suficientes para invertir más en patinaje artístico

Más allá de Javier Fernández, Sara Hurtado y Adrián Díaz dejaron junto a sus respectivas parejas, Kirill Khaliavin y Olivia Smart, a España muy bien situada en los últimos campeonatos de Europa antes de colgar los patines. En cuanto a Juegos Olímpicos se refiere, Adri y Olivia fueron diploma en danza y Laura Barquero y Marco Zandron, undécimos en parejas. Sin duda, grandes resultados que han dejado a la delegación nacional en muy buen lugar.

La historia más triste del patinaje español en los últimos tiempos es la de Sara y Kirill. Cuando la madrileña y el catalán se disolvieron como pareja de danza, Hurtado se unió a Khaliavin y, aunque él adquirió la nacionalidad española para competir bajo bandera rojigualda, ella se marchó a Moscú a entrenar con él aprovechando así la calidad de las pistas y de los entrenadores que hay en Rusia. El estallido de la Guerra de Ucrania los obligó a venir a España y, al verse tan desamparados por la falta de recursos, decidieron retirarse.

La Federación Española de Deportes de Hielo no ha vuelto a ofrecer datos desde 2021 sobre el número de licencias que existen a nivel nacional. Aquel año, había 765 licencias registradas. Se trata de un deporte completamente minoritario. En cuanto a las pistas de hielo donde entrenar, tampoco se puede hablar con mayor optimismo: 16 pistas repartidas entre Murcia, Benalmádena (Málaga), Jaca (Huesca), Valladolid, Puigcerdà (Gerona), Vielha (Lérida), Valencia, Elche (Alicante), Majadahonda, Leganés, Madrid capital, Valdemoro y Boadilla (Madrid), Pamplona, Logroño, San Sebastián y Vitoria.

El patinaje sobre hielo español se reduce a 765 licencias y 16 pistas

Según el director de Hielo Español, Pedro Lamelas, de estas 16 pistas, solamente 11 cuentan con espacio suficiente para practicar patinaje artístico. Valencia, Elche, Benalmádena y Boadilla tienen escuelas, pero sus pistas son muy pequeñas. En cuanto a la de Valladolid, en realidad, es una pista de curling. Evidentemente, con unos recursos tan escasos es demasiado difícil llegar lejos.

La ciencia y la investigación en España

Por regla general, los españoles son personas con mucho complejo de inferioridad patriótico. Este tipo de gente se avergüenza de los errores que reyes y gobernantes españoles cometieron en otras épocas de la historia. Lo que no se han parado a pensar en que el pasado ya no se puede cambiar como sí que se puede hacer con el presente. Y sí, en la actualidad en España también hay cosas que deberían dar muchísima vergüenza. Una de ellas es la precariedad laboral en la investigación científica.

La precariedad laboral en la investigación científica debería dar mucha más vergüenza que cualquier error que España haya cometido en el pasado

Los avances médicos han ayudado a lo largo de los años a mejorar la calidad de vida de las personas y a combatir enfermedades que antaño eran incurables. Estos progresos han sido posibles gracias a la investigación. Sin embargo, investigar no es precisamente lo que más rentable sale en España. La mayoría de investigadores españoles tienen que salir al extranjero porque aquí cuentan con unas condiciones de trabajo pésimas donde la estabilidad nunca llega. Según un informe de la Comisión Europea, España ha perdido más de 12.000 investigadores en lo que va de década. Contra los problemas del presente aún se puede luchar, así que España, ponte las pilas.

@ravelodeporte