16 Oct Ansu Fati vs. Leo Messi: diferencias entre ser joven y ser veterano en el Barça

Isabel Arroyo Sauces

Quizás os estéis preguntando al leer el título de este artículo por qué aparece en El arroyito redondo y no en Versus. La razón es porque en Versus escribo artículos y reportajes interpretativos pero en un modo impersonal mientras que en El arroyito redondo solo escribo desde mi punto de vista dando mi opinión en primera persona.

El rendimiento de un equipo va mucho más allá de los terrenos de juego

Puede que mucha gente diga que para ganar títulos y obtener un buen rendimiento en el equipo hay que centrarse en los entrenamientos y en el sistema de juego. Por supuesto, todo lo referente a la técnica es fundamental, pero el fútbol es mucho más complejo y va mucho más allá de lo que los jugadores hagan o no hagan en el campo.

¿Qué puede influir más este año en el Barcelona: la veteranía de Messi o la juventud de Ansu Fati?

Por ejemplo, otro año más, la pregunta del millón (entre otras tantas) es: ¿Será capaz el Barcelona de ganar títulos esta temporada? Sin tener en cuenta ningún tipo de fanatismo, simpatía o antipatía, lo normal sería analizar a todos los jugadores tanto por separado como en conjunto. Evidentemente, aquí podríamos estar una semana si me pongo a hacer eso, así que me voy a centrar solamente en dos futbolistas: Leo Messi y Ansu Fati. ¿Qué puede influir más este año en el Barcelona: la veteranía de uno o la juventud del otro?

Leo Messi y Ansu Fati en los terrenos de juego

La pasada temporada aún queda muy reciente y los aciertos y los errores del Barça se juntan con este curso que apenas lleva un mes en competición. Uno de los temas que más se hablaba la campaña pasada era de la edad de los jugadores, pues piezas fundamentales como Leo Messi, Luis Suárez, Gerard Piqué o Sergio Busquets entre otros ya han sobrepasado los 30 años. Ley de vida que, aunque siempre serán demasiado buenos, ya no les queda tanta gasolina como cuando eran chavalitos.

Es ley de vida que a un futbolista de más de 30 años ya no le quede tanta gasolina como cuando era más joven

Antoine Griezmann se estará tirando de los pelos al comprobar que en el Barcelona no puede dar todo lo que en su día dio en el Atlético de Madrid. Todo lo contrario ha ocurrido con Luis Suárez, que ya no se sentía a gusto en el conjunto azulgrana y parece que ha encontrado su sitio en el feudo rojiblanco. Por su parte, el Barça sí que lo está echando de menos ya que ahora que no cuenta con un 9 puro, le es más difícil meter los goles por el centro.

Con la marcha de Luis Suárez, al Barcelona le está siendo más difícil marcar goles por el centro

En cuanto a Ansu Fati, ya os dije en una colaboración con Silbato Champions que es un jugador que me gusta mucho. El haberse convertido en el jugador más joven en marcar un gol con la selección española de la historia le ha dado un subidón e incluso cuando el Barcelona juega mal, el herrereño destaca. Yo me atrevería a decir incluso que con su juego le ha llegado a hacer sombra al mismísimo Leo Messi. Por su parte, Messi siempre será Messi y sigue haciendo virguerías con sus botas, pero a menudo falla lo que antes no fallaba y convertía en un espectáculo.

Más allá de los terrenos de juego

Fuera de los terrenos de juego, queda muy reciente el deseo de Messi de dejar el Barcelona, el cual quedó en nada porque finalmente vio que lo mejor para sus intereses era acabar contrato en 2021. La cuestión es que el argentino siempre ha sido muy comedido con sus palabras, pero en más de una ocasión dejó entrever que había mal rollo en los despachos. Neymar también hizo lo mismo en su momento y este verano, Cesc Fàbregas también ha dicho algo parecido. Yo no trabajo con ellos ni estoy a favor ni de unos ni de otros, pero cuando más de un jugador dice lo mismo, Dios sabe qué trapos sucios habrá dentro de la directiva del Barcelona.

Por lo que varios jugadores han dejado entrever, Dios sabe qué trapos sucios habrá dentro de la directiva del Barcelona

Me pongo a empatizar con Messi. Me imagino que, como no le queda otra que cumplir contrato, habrá dicho el célebre refrán de lo que me quede de estar en este convento, me cago dentro. El problema es que un año es muy largo. Este tema me recuerda a mi última mudanza dentro de Madrid. Me fui bien lejos de donde vivía porque había acabado muy quemada de la convivencia y del entorno en general, por lo que ya sentía que me faltaban fuerzas hasta para respirar el aire de ese mismo distrito. Hasta que encontré nuevo piso, pasé diez días interminables llenos de angustia. Comparando mi caso con el de Messi, me compadezco de él, porque si está quemado con el jefe, diez días puedes aguantar ese sinvivir, pero un año… No quisiera estar ahora mismo en su lugar.

A Ansu Fati lo veo mucho más ilusionado con su porvenir que preocupado por la directiva de su empresa

Por su parte, a Ansu Fati todavía le falta experiencia y eso puede ser muy bueno para el equipo. Que levante la mano quien tenga más de 30 años y piense que ya está curado de espantos en la vida, en el amor y en el trabajo: ¿verdad que muchos de los sueños veinteañeros se quedaron tirados en la cuneta porque la propia experiencia los mató? Pues lo mismo le pasa a este chaval.

Puede que al Barça le venga bien la inexperiencia de Ansu Fati

Es probable que el herrereño (ya sé que no ha nacido en Herrera, pero se ha criado allí igual) todavía no haya probado la cara amarga de ser futbolista profesional, la presión que conlleva jugar en un equipo como el Barcelona o las consecuencias negativas que puede llegar a haber en un mal ambiente de trabajo. No es menester que todavía se dé cuenta. El Barcelona no es Ansu Fati, ni Leo Messi ni otro más: es un equipo en sí y todos los detalles cuentan. El tiempo dirá hasta qué punto se declina la balanza hacia el mosqueo de los veteranos o hacia la inocencia de los más jóvenes. Es entonces cuando el Barça puede perder o ganar, pero más allá de eso, Ansu Fati, Messi y compañía dejan de ser un conjunto para convertirse individuos a los que hay que analizar uno por uno.

@ravelodeporte