31 May Amancio y Butragueño: Dos versiones contrapuestas de ser el 7 del Real Madrid
Mientras que Amancio Amaro asegura que su dorsal fue impuesto, el Buitre se siente muy orgulloso de haber sido el 7 del Madrid
Isabel Arroyo Sauces
El 23 de noviembre de 1947, el antiguo estadio Metropolitano acogía un derbi: Real Madrid-Atlético de Madrid. Ese día, ocurrió algo especial. Y es que por primera vez en la historia, los jugadores blancos llevaban dorsales numerados a sus espaldas. Esos números asignaban una posición concreta a cada jugador y al 7 le correspondía el de extremo derecho. El derbi cayó de manos de los atléticos por 0-5 y los aficionados colchoneros parodiaron este resultado con la idea de los madridistas de numerar las camisetas. Aún así, a la federación le pareció una genialísima idea y a partir de la temporada 48/49, se impuso la norma de los dorsales como obligatoria. Con el paso del tiempo, el dorsal número 7 fue adquiriendo un significado especial dentro del Real Madrid y ha sido portado por jugadores que han hecho historia dentro del equipo blanco tanto con sus goles como con sus títulos como con su compromiso. Amancio Amaro y Emilio Butragueño han sido dos de ellos, el 7 de dos generaciones bien distintas y como tales son sus experiencias y opiniones acerca de este dorsal tan especial.
Amancio Amaro: «Yo nunca he sido un 7, sino un 8. El 7 me lo impusieron»
Cuenta Tomás Roncero en el libro Anecdotario Madridista. El madridismo como nunca te lo habían contado de la periodista de CR, Isabel Arroyo, que la leyenda del 7 comenzó con Juanito y no con Amancio porque el jugador gallego comenzó siendo el 8. De igual modo lo contrastó Amancio durante el Foro Luis de Carlos dedicado a las 33 ligas del Real Madrid: «A mí me impusieron el 7, yo era 8. Yo nunca he sido un 7. Cuando llegué, empezó jugando Justo Tejada, que procedía del Barça, de extremo derecho, pero al tercer día pasó a la reserva y yo pasé a ser 7. En aquel tiempo, jugaba Pancho de delantero centro y cuando se fue, recuperé esa posición». El culpable de que Amancio se convirtiera en un 7 histórico muy a su pesar fue Miguel Muñoz, el entonces entrenador del Real Madrid (1959-1974), que vio en el futbolista coruñés a todo un extremo derecho, pero con él, Amancio se quedó con las ganas de jugar en la posición de interior diestro.
Butragueño: «Estoy muy orgulloso de haber sido un 7 del Real Madrid»
Por su parte, Emilio Butragueño es un mítico 7 del Real Madrid que pasó por varios dorsales previamente: «Cuando jugaba en el Castilla, era el 9. El día de mi debut en el Ramón de Carranza frente al Cádiz, jugué con el 14. Después me fueron dando los dorsales que buenamente sobraban hasta que llegó Hugo Sánchez, que fue cuando definitivamente él sería el 9 y yo, el 7». Madrileño de nacimiento y socio del Madrid desde un día después de nacer, Butragueño estuvo a punto de no poder entrar en las categorías inferiores del conjunto de Chamartín ya que no pasó la prueba y hasta que por fin lo admitieron, pasó un año. Una vez en el primer equipo, recibió muchas ofertas suculentas por parte de otros clubes, pero el ‘Buitre’ prefirió quedarse. Fue el líder de una generación inolvidable y cuando le preguntan por su mítico dorsal, Butragueño lo tiene muy claro: «Estoy muy orgulloso de haber sido un 7 del Real Madrid».
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